Me hartaron, entre otros, los comerciales de AXE (Unilever), los de productos de limpieza varios, los de pañales, papel higiénico, toallitas femeninas y los de sopas, en los que las mujeres somos, ni más ni menos, que "presas" de los machos castradores junta-minas y verdaderas esclavas de las actividades hogareñas, como si ese fuera el único rol socialmente permitido bajo el que podemos sonreir...
¿En la cabeza de qué publicista se metió la imbecilidad de que a las mujeres nos encanta limpiar pisos, inodoros, culos de bebés y prepararle el morfi al hombre proveedor que vuelve de trabajar todo el día?
¿Quién es el neonazi que determina que un negro, de mierda, haga que te definas entre "la puerta o la vida"?
O los publicistas están cada día más escasos de ideas o nos hemos acostumbrado a que nos tomen por pelotudos, racistas, indiferentes y sinvergüencistas.